El consumo de tabaco a nivel mundial sigue en aumento a pesar de provocar daños significativos en el fumador, en las personas que lo rodean y en la sociedad misma. A continuación, presento algunas alternativas para ayudar a las personas que quieren liberarse del consumo del tabaco.  

Un adicto al tabaco

Un adicto al tabaco es aquel que, consciente o no depende de fumar, necesita consumir cantidades cada vez mayores de tabaco, según el DSM-V.

El tabaco nos brinda sensaciones placenteras y de distracción a simple vista, aunque las enfermedades asociadas al consumo de tabaco son una de las mayores amenazas para la salud pública del planeta.

La adicción al tabaco presenta dos problemas a la hora de enfrentarse a esta:

La adicción física, esta sustancia provoca una segregación de dopamina, la hormona que nos hace pensar que determinadas cosas son agradables, y aumenta los niveles de endorfinas, dándonos una sensación de euforia.

La adicción psicológica, fumar, se convierte en un hábito, asociado el acto de fumar a muchas situaciones de su vida diaria que le producen placer o alivio, reuniones sociales, fumar con amigos, ansiedades, tristezas, entre otras.

 

La nicotina es altamente adictiva: La nicotina puede ser incluso más adictiva que la misma cocaína, por lo que nuestro organismo se acostumbrará en poco tiempo a dicha sustancia y se generará una necesidad en nuestro organismo por consumir más nicotina.

 

Pasos para superar la adicción del tabaco

Tener el deseo de no querer fumar más:

Ese deseo inicial será el combustible para mantenerte apegado al plan de batalla.

 

Escribe las razones para dejar de fumar:

Enumera los motivos reales que te empujaron a parar de fumar. Esto lo puede hacer en papel y colócalo en lugar de fácil accesibilidad para ti.

 

Consciencia de los daños del tabaco:

Familiarízate a través de video y textos de los daños que provoca el tabaco en ti y a tus personas cercanas.    Hazte consciente, de lo inconsciente que eres al poner en peligro a tus familiares.  

 Inicia tu plan de dejar de fumar un lunes:

Aprovecha el impulso de inicio de semana para tu objetivo.

 

Disminuir el consumo del tabaco gradualmente:

Es recomendable que al momento de fumar lo asocies simultáneamente a algo desagradable (olor, sabor nauseabundo…). Esto tiene como objetivo disociar la fórmula tabaco es (=) a sensación agradable en tu cerebro.

 

Dieta saludable:

Una dieta saludable y equilibrada te ayudará a suministrarle energía limpia a tu cuerpo, lo que estará mejor preparado para enfrentarse a la situación.

 

Incrementa el consumo de agua:

El agua ayuda a la limpieza de tus células, y todo tu organismo. El hábito de beber agua con frecuencia es sinónimo de salud.

 

Haz ejercicio físico:

El ejercicio es el mejor antiestrés natural, este ayuda a la producción de serotonina y dopamina en tu cerebro. Esto, te ayudará a manejar mejor el estrés que provoca batallar con una adicción.

Cuidar los hábitos:

Evita realizar esas actividades en que siempre te fumabas tabaco.

 

Realiza un nuevo hobby:

Practicar yoga, técnicas de relajación o algo que te agrade, ayudará a romper tus rutinas habituales a la vez que te produce satisfacción.

 

Descansa:

El proceso de dejar una adicción cargará al cuerpo de tensiones y malestar diversos. El descanso ayudará a la regeneración del cuerpo y a recargar tus energías.

 

Bota el tabaco:

Cuando estés preparado, elimina todo el tabaco que tienes en casa o en cualquier otro lugar.

 

Cuéntalo:

Comparte tus logros con tus familiares y amigos, pero sobre todo gózatelo tú mismo y a lo grande.

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